Alejandro: “El día que me dieron la testosterona fue un subidón increíble”

Alejandro es un chico de 18 años que vive en Alicante. Él a lo largo de su vida no se ha sentido cómodo con su cuerpo, por lo que ha conseguido cambiarlo y ser el chico que siempre había querido ser. Ahora es cuando más cerca está de conseguir su sueño. Nos cuenta cómo son estas fases y cuales han sido las emociones que ha sentido al ser una persona transexual.

Pregunta: ¿Cómo es su día a día?

Respuesta: Tengo una rutina normal: me levanto, me visto, voy al instituto, llego a casa, como, duermo la siesta, estudio algo y quedo con amigos.

P: ¿Hubo algún cambio en su día a día de ahora a antes?

R: No muchos, pero si es cierto que la gente me trata de otra manera, pero no hay muchos cambios. Aún así me trata igual todo el mundo y nadie se ha metido conmigo ni nada

P: ¿Cómo descubrió que era transexual y cómo lo contaste?

R: Yo me empecé a dar cuenta porque desde pequeño veía que no era igual que las niñas de mi alrededor, me sentía bastante diferente, nunca me han gustado los juegos de niñas y siempre estaba con los niños. A raíz de YouTube empecé a ver videos de chicos trans y vi que me sentía identificado, pero nunca llegaba a decirlo. Cuando vas creciendo lo vas pasando peor, te vas dando más cuenta y hay un día en el que explotas y necesitas decírselo a alguien. Yo empecé diciéndolo a una de mis mejores amigas y me apoyó al 100%. Ella fue la que me cambió el nombre, me gustó y así me lo puse. De ahí se lo conté a mi madre y ella me apoyó en todo, me llevo al psicólogo para ir al endocrino y a raíz de eso se lo dije a mi padre, aunque me costó más decírselo porque no tenía tanta confianza con él y no me sentía tan seguro. Todo el mundo ya sabe que soy Alex, toda mi familia y todos me respetan y apoyan.

P: ¿Cuáles son las fases del proceso?

R: Lo primero que hice fue ir a mi médico de cabecera para informarme y desde ahí fui a un centro de ayuda de disforia de género en Alicante y el psicólogo de allí redactó un informe para poder ir al endocrino. A mi sólo me hizo falta una vez ir al psicólogo porque depende de la disforia que tengas puedes necesitar más o menos. De ahí tuve que esperar como dos meses para que me diesen cita con el endocrino. Ahí me hicieron un motón de pruebas como electrocardiogramas, tacs, análisis de sangre para ver cuanto me tenían que dar de testosterona… El 21 de agosto fue la última cita con el endocrino que tuve y empecé con la testosterona. Llevo con ella tres meses y al cuarto mes tienes que volver al endocrino y te hacen otro análisis para ver cómo van tus grados de testosterona en sangre y cómo vas en general. Actualmente estoy esperando a que cumplan esos cuatro meses para volver al endocrino.

P: ¿Qué es disforia?

R: Son las personas transexuales, la gente que no se siente bien con su cuerpo, no está a gusto con él y siente que ese cuerpo no le pertenece, lo que provoca que le de miedo enseñarlo.

P: ¿Cuáles han sido sus cambios más notorios que ha tenido con la testosterona?

R: El mayor cambio que he visto en mi ha sido la voz, me ha cambiado un montón. Está comenzando a salirme bigote y se me ha ensanchado un poco la espalda. Y bueno, hay veces que siento más agresividad de lo normal o que me altero, supongo que eso será como efecto secundario. De momento esos son los cambios más notables.

P: ¿Tuvo el apoyo que usted quería y necesitaba en ese momento?

R: Si. Todos mis compañeros y amigos me ayudaron. En el instituto el orientador y la directora hablaron conmigo y me dieron todo su apoyo. Tengo la suerte de que mi instituto es bastante abierto de mente.

P: ¿Ha valido la pena tanta espera y tantos cambios?

R: Por supuesto. Una vez que tu consigues coger, soltarlo y decirlo empiezas a ser tú mismo. Te empiezan a llamar por tu nombre de verdad, te empiezan a tratar como tú quieres. El día que llegas al endocrino y te dan la testosterona es un subidón increíble. Ahí es cuando realmente empiezan los cambios.

P: ¿Se podría decir que se siente cómodo consigo mismo ahora?

R: Si, bastante. Estoy consiguiendo los cambios que quería conseguir.

P: ¿Hay algo que aún le gustaría cambiar?

R: Quiero hacerme la mastectomía, que es la operación que consiste en quitar el pecho.