OSCARS 2015, una retrospectiva

Otro año los grandes premios del cine han tenido su noche, y como muchas otras pasadas, hemos tenido tanto alegrías como decepciones. Para empezar, la gala ya venía con muchos olvidados a la cabeza, cosa que la gente no tardó en disparar por redes sociales. “Interstellar”, “Perdida”, “NightCrawler” eran tres de las favoritas de la gente para estar entre las listas más cotizadas pero al final no fue así.

Conforme la noche avanzaba los primeros premios ya encadenaban una de las dos grandes vencedoras, “El gran Hotel Budapest”, con cuatro premios a mejor maquillaje, vestuario, banda sonora y dirección artística. Los premios para los actores se centraron en J.K Simmos, por “Whiplash” y Patricia Arquette por Boyhood en los lugares secundarios, y Eddie Redmayne por “La teoría del todo” y Julliane Moore por “Siempre Alice” como roles principales. Conforme la gala iba sucediendo se fueron entregando todas las categorías técnicas donde Interstellar ganó su única nominación en éste apartado, mejores efectos especiales, “American Sniper” se llevó a mejor efectos de sonido, “Whiplash” a mejor edición de sonido y a mejor montaje y donde “Birdman”, la otra gran triunfadora de la noche, se llevó a mejor guión original, mejor dirección de fotografía, mejor director para Iñárritu y el más codiciado premio, OSCAR A LA MEJOR PELÍCULA DE 2014. 

Tras esto, el resto de categorías no variaron mucho de las apuestas, exceptuando “Big Hero 6” que ganó a mejor película de animación. “Selma” se llevó el oscar a mejor canción, “Ida» a mejor película de habla no inglesa, frente a la gran competidora “Relatos salvajes”, “Buenas migas” y “Crisis hotline” se llevaron los Oscars a mejor cortometraje de animación y documental, “La llamada” ganó a mejor cortometraje de ficción y “Cityzenfour” ganó a mejor largometraje documental. Por último «The Imitation Game» que optaba a ocho estatuillas consiguió llevarse únicamente la de Mejor guión adaptado.

Por otro lado, la 87 gala de los Oscars venía condicionada por lo que a priori parecía un presentador convincente para desarrollar una gala humorística y con ritmo, y por otro lado unas nominaciones que iban a traer polémica respecto a los premios…y así ha sido. Neil Patrick Harris condujo una gala que puede definirse con un “quiero y no puedo”, algo muy raro viniendo de Hollywood en donde todo parece tan espectacular y con una estética propia de Broadway. Y a pesar de que tuvo un comienzo prometedor con un número más visual que  musical, la gala no logro alzar el vuelo conforme iba avanzando. Los premiados se iban sucediendo tal cal estaban en las quinielas, y Patricia Arquette se marcó su minuto de gloria con un discurso bastante inapropiado para la gala. La gala se hizo demasiado larga con unas actuaciones musicales que estiraban el horario haciendo más pesado el ritmo y deseando que acabase el evento por parte del espectador. A destacar los números musicales de las canciones “Glory” para el film Selma, que hizo llorar a todos los afroamericanos de la sala y a algún que otro invitado que estaba sensible, y la genial “Everything is awesome” de la Lego película.

Si me tuviese que quedar con los momentos de la gala sin duda diría que fueron la performance de Lady Gaga con su gran homenaje al musical The Sound Of Music, y la parodia de Harris sobre la película de Birdman emulando la yafamosa escena de Michael Keaton corriendo por Times Square en paños menores. Respecto a los galardones entregados ha habido mucha polémica con tres films que en un principio parecía que iban a tener más igualada la cosa, pero no fue así. El gran hotel Budapest y Birdman empataron con cuatro estatuillas, venciendo esta última con las más importantes incluyendo mejor película, director y guion original a la muy sobrevalorada Boyhood de Richard Linklater. No digo que Boyhood no mereciera estar en la gala. El trabajo de Linklater es muy valiente y arriesgado y le ha salido bien. Pero el film sólo tiende a ser recordado por su trabajo de doce años de rodaje y ver el resultado de cómo evolucionan el aspecto de los protagonistas, dejando de lado un guion simple y fácil que bien se podría haber trabajado un poco más con un resultado más interesante.

Curiosamente este año he disfrutado más con la gala de los Goya que con los Oscars, y ya es raro porque en España siempre tratamos de imitar a Broadway en el cine pero esta vez ha sido algo diferente lo que me ha hecho cambiar de opinión. Será que Andalucía ha despuntado mucho este año con su humor. En resumen, Hollywood exprime demasiado sus recursos y olvida a veces la elaboración de un buen guion que contente a la audiencia y deje fuera los chistes fáciles y recursos que ya están muy usados. Veremos qué pasa el año que viene.