“El desafío (The Walk)”, Zemeckis encuentra el equilibrio

“El desafío (The Walk)”, Zemeckis encuentra el equilibrio

Uno de los directores más impecables de la industria cinematográfica como Robert Zemeckis, vuelve tras la magnífica “El vuelo” con una historia real que lleva por título “The Walk”, basada en la increíble hazaña del artista Phillipe Petit que realizó en los años 70 cruzando los extremos del World Trade Center sobre un cable de acero. Joseph Gordon – Levitt es su protagonista.

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Cuando un realizador con una filmografía tan brillante con títulos como la trilogía de “Regreso al futuro”, “Forrest Gump” o “Náufrago”, decide intentar algo tan difícil como lograr una buena película basada en una historia, que ya se contó en el documental ganador del Oscar “Man on wire”, la expectación suele ser bastante alta. Y debo decir que el autor de Roger Rabbit lo ha conseguido. Al igual que Phillipe Petit, Zemeckis logra salir victorioso del enfrentamiento con el documental sobre el mismo acontecimiento y nos regala una película, no sólo fantástica en lo audiovisual, sino también con una lección de la vida en la que se persiguen los sueños hasta conseguirlos.

the-walk-pic33d-pxl2Era el día de reyes, fui a la sesión de las 22:00 y éramos 15 en la sala (lo agradecí porque no soporto oír murmullos durante la proyección). Por ese motivo creo que disfruté tanto la película. Desde que empieza hasta que acaba el espectador logra comprender lo que pasa por la cabeza de Phillip mientras sueña con dar el golpe de su vida. Lo más interesante del relato es la progresión del personaje principal. A pesar de tener un punto zumbado o incluso suicida, llega un punto en el que comprendes por qué hizo eso, esa sensación de caminar sobre el cielo, de ver el mundo de otra manera, y por supuesto la filosofía de vida. “The Walk” presenta a un hombre que no teme a la muerte. Nunca pronuncia esa palabra. Vive la vida con la ilusión de caminar sobre las torres gemelas pase lo que pase. Su vida está ligada a realizar ese acontecimiento. Y cuando uno sale del cine siente que en la vida hay siempre algo que nos motiva a estar tan locos como Phillipe. Porque al fin y al cabo es una lucha por lograr nuestras metas en la vida.

Robert Zemeckis para mí es un mago. Es un director que siempre ha logrado dar con el equilibrio entre42749 lo ficticio y lo real en el cine. Técnicamente hablando, su trabajo para “The Walk” es como siempre impecable. Una dirección con mucho ritmo, con suspense, con toques de humor y sobretodo, lo que mejor se le da, la combinación de los efectos visuales con los escenarios reales (la última media hora es de lo mejor que ha filmado en su carrera con diferencia). El guion está basado en el best-seller del propio protagonista “Alcanzar las nubes”, pero además se centra también en sus años como aprendiz de un famoso funámbulo francés, y obviamente, en el desarrollo y ejecución del plan que llevó a cabo Petit con sus amigos para dar el golpe. La fotografía es perfecta, todos los planos están pensados para contar con todo detalle lo que está sucediendo en ese momento (atención a la secuencia de la tensión del cable de acero en plena noche). El montaje está muy cuidado para que la película resulte igual de atractiva que sus últimos treinta minutos donde ocurre la hazaña. El diseño de producción recrea los años 70 con mucha fidelidad en cuanto al vestuario y arquitectura de los escenarios y también en la selección musical de grupos de la época. el-desafio-the-walk-2015-599x330Además Zemeckis vuelve a contar en la banda sonora con su colaborador habitual Alan Silvestri, que nos deleita con una banda sonora que contiene swing, sinfonismo y composiciones con aires franceses que fusiona con un toque americano sin problema alguno (atención a la escena en la que planifican el golpe). Y por supuesto la labor del equipo de efectos visuales, recreando las torres gemelas con tal detalle que produce hasta escalofríos en algún momento. Por último la labor de Gordon-Levitt como Petit es bastante notable, no solamente por el carácter terco y loco del personaje, sino por su entrenamiento y empeño que realizó para prepararse el papel (Levitt aprendió a caminar por una cuerda).

En resumen, Zemeckis nos regala otro film para deleitar con los cinco sentidos al completo, y para recordar lo increíble que puede llegar a ser el ser humano si logra todo lo que se propone. Recomiendo verla en pantalla grande para apreciarla.

NOTA: 7/10

Adrián Arnáiz Abril

Estudiante de Publicidad y RRPP en la UA. Amante del cine y la TV y realizador audiovisual de hobbie poco común entre la gente normal, pero mola.

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