Estudiar y trabajar a la vez, ¿es compatible?
Muchos dicen que trabajar mientras estudias te hace más responsable y que aprendes a valorar el dinero. Y sí, eso puede ser verdad. Pero también es verdad que no es nada fácil. Yo he intentado compaginar los estudios con un trabajo de media jornada y la verdad… hay días que no doy más.
Por un lado, tener tu propio dinero te da libertad. No tener que pedirle a tus padres para todo te hace sentir bien. Además, aprendes cosas que en clase no enseñan, como tratar con clientes, trabajar en equipo, ser puntual. Todo eso está bien.

Pero por otro lado es muy duro. Hay días que salgo de clase a las 19.00 h., entro a trabajar a las 20.00 h. y salgo a las 2.00 h. de la madrugada. ¿A qué hora estudio? ¿A qué hora descanso? A veces llego tan cansado que no me entra nada en la cabeza. Y eso al final se nota en las notas y en la salud.

También me pasa que mientras otros compañeros tienen tiempo para hacer planes, yo estoy contando las horas de sueño que me quedan. Y no es que me queje por gusto, es que no todos tienen la opción de “solo estudiar”. A muchos nos toca trabajar por necesidad.
En conclusión, trabajar mientras estudias tiene sus cosas buenas, pero también te puede pasar factura si no sabes equilibrarlo. Creo que se debería valorar más a los estudiantes que hacen ambas cosas, y ojalá hubiera más apoyo, como horarios más flexibles o becas que realmente lleguen a quien lo necesita.
